No han sonado campanas ni el timbre de mi puerta.
Así que de esta manera es como termina todo, termina con silencio. No importa, sigues siendo tan adorable como siempre, más incluso. Más que cuando me querías a pesar de que yo era alguien difícil de querer. Tú eres tan adorable y yo estoy tan frío.
Recuerdo que una vez hicimos el amor y después nos quedamos dormidos. Yo me desperté más tarde y en la oscuridad te acaricié y penetré mientras dormías. Te despertaste sorprendida y excitada, te gustó, lo disfrutaste, creo. Supongo que aquello fue el mejor regalo que te hice, bueno también te amé un poco, más de lo que nadie halla pensado, pero eso supongo que poco importa frente a lo demás.
Así es como termina todo, con silencio. La vida nos va diluyendo de las mentes que nos podrían hacer eternos, y sin nadie que nos recuerde con cariño y amor sólo somos animales alimentándonos de carne y momentos calientes, llenando nuestras bocas de saliva y aire, uniendo nuestros cuerpos a otros cuerpos en momentos de insoportable tristeza.
Han pasado muchos años y nunca pensé durar tanto como para que mis músculos se empezaran a hacer de piedra, el olvido siempre me ha ido ganando terreno. Supe desde el principio que no llegaría a ver la eternidad.
Tú ya eres eterna en mi mente; sigues tan adorable como siempre, yo estoy un poco más frío.
Así es como termina todo: con silencio.
Así que de esta manera es como termina todo, termina con silencio. No importa, sigues siendo tan adorable como siempre, más incluso. Más que cuando me querías a pesar de que yo era alguien difícil de querer. Tú eres tan adorable y yo estoy tan frío.
Recuerdo que una vez hicimos el amor y después nos quedamos dormidos. Yo me desperté más tarde y en la oscuridad te acaricié y penetré mientras dormías. Te despertaste sorprendida y excitada, te gustó, lo disfrutaste, creo. Supongo que aquello fue el mejor regalo que te hice, bueno también te amé un poco, más de lo que nadie halla pensado, pero eso supongo que poco importa frente a lo demás.
Así es como termina todo, con silencio. La vida nos va diluyendo de las mentes que nos podrían hacer eternos, y sin nadie que nos recuerde con cariño y amor sólo somos animales alimentándonos de carne y momentos calientes, llenando nuestras bocas de saliva y aire, uniendo nuestros cuerpos a otros cuerpos en momentos de insoportable tristeza.
Han pasado muchos años y nunca pensé durar tanto como para que mis músculos se empezaran a hacer de piedra, el olvido siempre me ha ido ganando terreno. Supe desde el principio que no llegaría a ver la eternidad.
Tú ya eres eterna en mi mente; sigues tan adorable como siempre, yo estoy un poco más frío.
Así es como termina todo: con silencio.
